miércoles, 4 de noviembre de 2015

Poesía por la Semana de la Biblioteca Escolar: "Letanía a un Libro"

El 10 de noviembre, está relacionado con la celebración de la Semana de la Biblioteca escolar, , conceptualizado como un espacio para leer, escribir y aprender. Es una recopilación del material utilizado durante muchos años en su biblioteca y que, generosamente, ponen a disposición de otros equipos que decidan utilizar la biblioteca escolar como un espacio de aprendizaje para todas las áreas del currículo.

LETANÍA A UN LIBRO
Abrimos tus pastas,
y son las puertas a la vida.

Eres un tesoro por descubrir,
la isla donde perderse,
un viaje sin moverse del sillón,
alivio para el alma,
bálsamo para el corazón,
distracción para la mente,
... esencia del sentimiento,
refugio donde llorar,
medicina para reír.

Diccionario para el sabio,
para el necio sorpresa,
regalo para el amor,
compañía que no molesta,
amigo que no discute,
abrigo en invierno,
en verano albergue fresco,
música para el anciano,
pintura para el niño,
esperanza del nuevo día,
maestro sin horas,
catedrático de la historia.

Consuelo para el triste,
exclamación para tu cara,
sosiego al desasosiego,
mejoría de la salud,
fascinación para tus ojos,
melodía para tus oídos,
a tu inquietud calma,
dulzor para tus horas amargas,
centro de atención,
polémica según tu cuentas,
revuelo con tu protesta…

Callado, siempre callado,
y sin embargo…
siempre tu voz perpetua.

Autora: Aurora Funes Granados. (Mayo 2013)

martes, 3 de noviembre de 2015

Poesía por la Semana de la Vida Animal: "Mirando un Animal"

La segunda semana del mes de noviembre celebramos la Semana de la Vida Animal, la cual se genera como respuesta al deterioro y desaparición de especies. Esta celebración busca inducir conciencia a través de diversas actividades de la importancia de la diversidad biológica para el ser humano y del daño que significa para la humanidad y para el equilibrio de la vida en el planeta su destrucción.
 
                       Poesía: Mirando un Animal
 
Tal vez sea Dios el que te necesita

para jadear, retozar y acoplarse,

jugar y desangrarse a través tuyo.

Animal, tú que observas este mundo

sin interpretaciones ni prejuicios:

¿Qué realidad es la real? ¿La que percibes

con tus sentidos limpios de opiniones,

o la que mi intelecto juzga cierta?

Tú cumples bien con tu breve destino:

ves cuando miras, oyes cuando escuchas,

estás presente con toda tu esencia.

Tú no te jactas de espiritualidades.

No pretendes ser: eres el que eres.

Apiádate, animal, de mi ignorancia:

tú que vibras a pleno y que te exaltas,

enséñame el secreto de la Vida:

a entregarme con tu misma inocencia

para que Dios me encuentre disponible.

 
                                  Fuente: Virginia Gawel,1995